En nuestro país, es habitual que los conductores ignoren al peatón. En las esquinas o sendas peatonales, aún con semáforo a su favor, la mayoría de las veces, los peatones tienen que parar para dejar pasar a autos, colectivos, camiones, motos y bicis. Lo curioso es que esos conductores, cuando bajan de sus vehículos, pasan a ser peatones también. Todos somos peatones, por lo que este 19 de marzo todos celebramos el Día de la Seguridad Peatonal. Pero ¿qué celebramos?
Las estadísticas mundiales indican que los peatones somos los usuarios más vulnerables en el sistema del tránsito, sumando cada año más de 270.000 muertes. En nuestro país, el año pasado se estima que más de 1500 peatones murieron en el tránsito. Más del 20% de todas las víctimas fatales.
La legislación de tránsito establece que los vehículos deben darle la prioridad a los peatones que cruzan la calzada por las esquinas o sendas peatonales, y con el semáforo a su favor, donde lo hay. Sin embargo, según un estudio de Luchemos por la Vida, solo el 10% de los conductoresles da la prioridaden la ciudad de Buenos Aires. Esto estimula a los peatones a cruzar por cualquier parte. Sólo un 10% de estos cruzan correctamente.Así en la ciudad, los peatones han resultado las principales víctimas. En 2018, 65 peatones murieron en la Ciudad de Buenos Aires, constituyendo el 44% del total de los muertos en el tránsito.
¿Qué se puede hacer para revertir esta realidad?
Luchemos por la Vida continúa e intensifica la campaña publicitaria de concientización en radio, televisión y medios audiovisuales “Dale al peatón su prioridad”, para generar conciencia en los conductores sobre la vital importancia de respetar y otorgarle al peatón su prioridad.
Pero también resulta imprescindible controlar y sancionar a los conductores transgresores de la prioridad peatonal (¡casi no se labran actas por esta grave infracción!) y de las velocidades máximas permitidas, para evitar que continúen estas muertes evitables.
Es posible implementar cambios urbanísticos para favorecer que los peatones y los conductores se encuentren lo menos posible, incrementando las áreas peatones, con pasos peatonales bajo y sobre nivel, reductores de velocidad, chicanas, etc.
Urge el marcado de las sendas peatonales en todas las esquinas, completar todos los semáforos existentes con los correspondientes peatonales, y completar las veredas en todas las zonas urbanas.