Una mujer de 58 años murió por los traumatismos recibidos cuando la ambulancia en la que era trasladada fue embestida por un auto particular en Díaz Vélez y Medrano, en el barrio porteño de Almagro. En el accidente también sufrieron heridas el chofer del vehículo, un enfermero, un médico y un familiar de la víctima y los ocupantes del automóvil involucrado. Uno de los profesionales de la ambulancia sufrió heridas de mayor consideración, ya que fue despedido contra el parabrisas, al no llevar puesto el cinturón de seguridad,
Tras el choque, que ocurrió alrededor de las 3 de la madrugada del martes pasado, la ambulancia subió a una vereda y se incrustó en el frente de una peluquería, mientras que el auto hizo un trompo y chocó contra un taxi.
La causa del mortal accidente: según los testigos, el conductor del auto particular tenía puestos auriculares, ya que escuchaba un reproductor de música MP3, por lo que no pudo escuchar la sirena ni la bocina de la ambulancia.
Este fatal accidente renueva un interrogante:¿todas las ambulancias que circulan con sirena y baliza encendidas tienen la urgencia que anuncian tener?. En otras partes del mundo no se perciben tantos vehículos de emergencia en plena actividad, como pasa con la ambulancias en el tránsito de Buenos Aires. Sin juzgar este caso en particular, ya que no es nuestra intención y no contamos con la información necesaria, es una realidad que, en nuestra ciudad muchas veces las ambulancias abusan del uso de la sirena y baliza, y circulan a excesiva velocidad, haciendo valer una prioridad de paso que les corresponde únicamente en la atención de la situación de emergencia médica, y no como parece ser uso y costumbre, en todo momento. Este comportamiento en quien conduce una ambulancia pone en riesgo su vida (además en este episodio algunos de los ocupantes del vehículo accidentado no tenían puesto el cinturón de seguridad) y la de todos los que compartimos el sistema del tránsito.