¡Lo valiosos que son los cascos!
Así, según las cifras que se expresaron en las Jornadas de Trauma y Cirugía llevadas a cabo en esa provincia, la atención de un accidentado leve – es decir, alguien que simplemente se cae en la calle- genera un gasto promedio de $5.000 en concepto de traslado al hospital, insumos, analgésicos, medicamentos, atención médica, estudios e internación. Esta cifra puede llegar a superar los 100.000 pesos cuando se trata de pacientes que han sufrido lesiones más graves.
De estas cantidades se desprende, entonces, un promedio de 75.000 pesos por accidentado, un número muy elevado si se considera que, tan sólo en mayo y junio, se atendieron 1.922 pacientes en el Hospital Regional por lesiones producidas en accidentes con motos.