La Dirección General de Tráfico ha presentado un proyecto de reforma al Reglamento General de Circulación que propone, entre otras modificaciones, el uso obligatorio de casco por parte de los ciclistas y de los ocupantes de bicicletas en cualquier tipo de vía (hasta ahora la obligación era sólo en vías interurbanas).
Algunas asociaciones de ciclistas y partidos políticos se oponen a la implementación de dicha medida porque creen que la “incomodidad” de llevar puesto un casco desalentaría el uso de bicicletas, el cual ha aumentado significativamente en los últimos años en España.
Ante estas objeciones, la directora de la DGT señaló que el número de ciclistas heridos y fallecidos aumenta cada año y que el uso de casco reduce en un 70% el riesgo de sufrir lesiones craneales, causa más frecuente de muerte en este tipo de accidentes. Además, países como Nueva Zelanda, Israel, Colombia, Finlandia y Estados Unidos (en 21 de sus estados) promulgaron la obligatoriedad del uso de casco para todos los usuarios de bicicletas.