Luchemos por la Vida en Intratables, América TV. Alcohol al volante y controles

     

El Dr. Alberto Silveira, Presidente de Luchemos por la Vida, analizó el caso del vuelco ocurrido el sábado 20 en Dolores. Ante la consulta del conductor Fabián Doman, reflexionó:

     “Parece que estamos nuevamente frente a un caso de un nuevo asesino al volante. Vos lo dijiste al principio del programa: si es El Pepo se conoce y se divulga, pero si no es tal vez no. Yo diría que es importante divulgarlo porque todos los días, en todo el país, hay gente como ésta que desaprensivamente, que mata impunemente. ¿Y por qué es esto? En el caso del alcohol y las drogas, porque tenemos poquísimos controles de alcoholemia en Argentina. Fíjense que la fiscal que intervino dijo que no encontró un solo alcoholímetro ni en Dolores, ni en Chascomús, para hacer un control en aire expirado. Eso significa que en Argentina no hay controles de alcoholemia, porque si en ciudades importantes como Chascomús y como Dolores, no tienen alcoholímetros para controlar el alcohol en sangre, quiere decir que casi no se controla. Imaginemos qué pasa en todo el resto del país. Entonces creo que no vamos a evolucionar en esto, si no tenemos suficientes controles.

     Entre un conductor borracho y uno que no lo está, la diferencia es entre el día y la noche. El conductor que ha ingerido alcohol -y depende de la cantidad esto es progresivo-, va perdiendo las reacciones, va perdiendo la velocidad de reacción, se genera asimismo una falsa sensación de seguridad y se siente autorizado a hacer cosas que si estuviese sobrio no haría, como por ejemplo ir a una velocidad mucho mayor de la que circula habitualmente. Empieza a confundir los colores, particularmente los rojos, no los percibe, lo cual afecta por ejemplo la percepción las luces de freno… Son muchísimas más las posibilidades de sufrir un accidente si se ha bebido. No nos cansaremos de decir que, si elegiste beber, elegí a otro para conducir, y si querés conducir no tenés que tomar. Pero en los hechos ocurre. En las últimas 3 semanas hubo 4 ó 5 accidentes emblemáticos – uno en Devoto, sin ir más lejos-, causados por conductores con cantidades siderales de alcohol, de más de 2 g/l de alcohol en sangre.

     Creo que hoy en día los medios están tomando conciencia de que este cambio cultural que en definitiva tenemos que lograr en Argentina para que no haya más muertos en el tránsito, es también obra de los medios, de la tarea de concientización.

     En accidentes como éste, en casi ninguno hay control de alcohol, ese es el problema. Las cifras son espeluznantes: en los países exitosos en dominar el tema del alcohol al volante, por ejemplo, en España realizan 6.000.000, en Francia casi 10.000.000 de controles de alcoholemia por año. Argentina no tiene cifras oficiales, pero en Luchemos por la Vida estimamos que no se hacen más de 300.000 por año. Entonces tenemos 20 veces menos controles de alcoholemia, prácticamente no tenemos. El aumento de la cantidad de controles de alcoholemia por el Día del Amigo en la CABA, con gran cantidad de positivos, prueba que se puede controlar, y que es absolutamente necesario.”