En el mundo, cada día son más las ciudades que disfrutan de calles seguras, con límites de velocidad bajos, acompañados con el diseño de infraestructuras y la aplicación efectiva de la ley, transformando los espacios públicos para beneficio de toda la comunidad.La Semana Mundial para la Seguridad Vial celebrada del 16 al 22 de mayo, tiene el lema "Calles para la vida” (Streets for Life) #Love30, para lograr ciudades más seguras, saludables, verdes y habitables.
Una disminución de la velocidad de 40 km/h a 30 km/h reduce en dos tercios las muertes en el tránsito, según han comprobado diferentes estudios internacionales en base a la evidencia de muchas ciudades de diferentes países, que ya tienen esta norma. Los mayores beneficiados resultan los más vulnerables en el tránsito, los peatones y los ciclistas, los niños, los adultos mayores y las personas con discapacidad.
Pero también produce beneficios en la salud y ambientales, al incentivar actividades como el caminar y el ciclismo, en lugar del uso del automóvil, reduciendo las emisiones de CO2 y la contaminación sonora.
Muchas ciudades del mundo ya disfrutan los beneficios de bajar la velocidad
La evidencia obtenida en todo el mundo demuestra que las calles con límites de velocidad bajos reducen el riesgo de sufrir lesiones graves y salvan vidas. Algunos ejemplos:
La OMS afirma que un aumento de la velocidad promedio de 1 km/h da lugar a un aumento del 3% en el riesgo de sufrir un siniestro y un aumento de entre un 4% y un 5% en la cifra de fallecidos.
Disminuir la velocidad salva vidas.
Dr. Alberto Silveira Viviam Perrone
Luchemos por la Vida Madres del Dolor