Policías en sus patrulleros, jueces en sus autos, políticos en funciones y candidatos que aspiran a serlo, se los ve, con demasiada frecuencia, en diarios, revistas y noticieros sin usar el cinturón de seguridad cuando circulan en automóvil.
Tal vez se olvidan de que el uso del cinturón de seguridad es “obligatorio” por ley para “todos”. Los funcionarios públicos deberían ser los primeros en cumplir con la ley, demostrándole de este modo a la población que las leyes del estado están en vigencia y para ser cumplidas para el bien personal y de la comunidad, tal como ocurre en las naciones que son modelo en seguridad vial.
En el mes de agosto de 1999 pasado, nuestra asociación envió al entonces Presidente de la Nación Dr. Carlos S. Menem y a cada gobernador e intendente del país, 1027 cartas documento instándolos a, además de dar el buen ejemplo de su uso, a usar su autoridad para hacer cumplir la ley que obliga al uso del cinturón de seguridad.
Una anécdota sueca: Estando esta asociación en viaje de estudio por Suecia en 1993, se dedicó una jornada completa a la visita de la estación central de la Policía vial de Estocolmo y a la observación del desempeño de repartición en diferentes puntos de la ciudad. Al observar que “todos” los agentes que circulaban en móviles usaban el cinturón de seguridad, uno de los miembros de la asociación preguntó, a uno de los efectivos, acerca del motivo por el cual lo hacían. Inmediatamente, el agente respondió:- “1º Porque la ley obliga a su uso y nosotros somos los primeros que tenemos que cumplir la ley, 2º porque es útil para salvar vidas en caso de accidente, y como estamos mucho tiempo en las calles de la ciudad, necesitamos usarlo mucho más que cualquier otro, y 3º porque tenemos que dar el buen ejemplo a la población, ya que si no lo usáramos, no podríamos convencer a los demás ni tendríamos autoridad moral para exigírselos”.