Luego de meses de internas, de elecciones y discursos públicos, escasos en propuestas en general, pero cargados de promesas diversas, quedó en evidencia que los candidatos a gobernar los destinos de los argentinos no tienen entre sus prioridades a la seguridad vial.
Luchemos por la Vida envió, en el mes de julio, a todos los precandidatos a Presidente de la Nación una carta documento para solicitarles información acerca de las propuestas de acciones proyectadas en relación a la seguridad vial en caso de resultar electos.
Tuvieron tres meses para responder. Sin embargo, solamente una de las candidatas finales a Presidente, Margarita Stolbizer, y dos precandidatos, enviaron una respuesta.
La ausencia del tema de la seguridad vial en la agenda de los candidatos presidenciales, salvo alguna alusión de último momento a mejorar la infraestructura vial, más para responder a las necesidades del sector agroindustrial que para aumentar la seguridad en el tránsito, resulta en extremo preocupante.
La vida de miles de personas se pierde cada año en el tránsito, y decenas de miles de vidas que resultan alteradas para siempre con discapacidades permanentes, fruto de los siniestros de tránsito; sin embargo, los candidatos presidenciales no tienen equipos o no quisieron dedicarle un mínimo de tiempo a responder a la demanda de la sociedad sobre este tema, que cercena la vida de veintiún argentinos cada día, y que, en definitiva, es otra cara más de la inseguridad, que por ahora se cobra más vidas que la delincuencia.
Mal pronóstico para los años por venir, para un problema gravísimo que amenaza la vida y la movilidad de todos los habitantes de esta Nación y que requerirá de toda la sociedad más compromiso y trabajo comunitario para revertir este desinterés político que se mide, lamentablemente, en pérdidas de vidas humanas.