Los más chicos también más seguros en el auto
Para salvarles la vida en caso de accidente. Cuando mamá, papá y el bebé viajan en el auto, aunque no lo sientan, están desplazándose a la misma velocidad que el vehículo y al unísono con él. Pero, en caso de una detención brusca, todo lo que no se encuentra atado dentro del auto seguirá su viaje hacia adelante y sólo se detendrá cuando choque contra algo (puede ser la parte delantera del coche, el parabrisas, el asfalto, etc.).
Cualquiera puede haber experimentado una leve sensación de lo que estamos hablando, en cualquier frenada algo fuerte. Entonces, la cartera que viajaba apoyada sobre el asiento se cae al piso o la bolsa con bebidas se vuelca.
El auto se frena contra el obstáculo Y los cuerpos de los ocupantes del vehículo, siguen moviéndose hacia adelante a la velocidad que el auto traía hasta ese momento, impulsados por una fuerza enorme, que equivale a 40 veces el peso de cada persona, desplegada en la desaceleración brusca. Si no están atados, golpearán contra la parte de adelante del automóvil y contra el parabrisas. Y los ocupantes de los asientos traseros, si los hubiere, serán impulsados con esa misma fuerza hacia la parte de adelante. Golpearán a los ocupantes delanteros y la parte frontal del vehículo. Eventualmente todos pueden ser despedidos fuera del auto, aumentando 6 veces las posibilidades de morir al impactar contra el suelo .
Por ello, es importantísimo que los niños mayores y los adultos viajen con los cinturones de seguridad ajustados y los niños más pequeños viajen sujetos en sus sillas especiales, las que se fijan al asiento con el cinturón de seguridad del vehículo. A estos últimos, por estatura y estructura ósea, los cinturones de seguridad del auto solamente, no los protegen adecuadamente. Y siempre, los menores de 10 años deberán viajar , según lo marca la ley Nacional, en los asientos traseros.
Lo que algunos padres piensan | La realidad |
A mi bebé lo llevo en brazos porque es más seguro | En caso de choque, aún a 10 Km/h, un adulto es expulsado de su asiento hacia adelante y la tendencia instintiva es abrir los brazos para frenar el impacto. En un instante habrá soltado al bebé. |
Solamente hace falta si se circula en ruta, a gran velocidad. | El 70% de los accidentes ocurren en trayectos cortos, a menos de 15 Km/h del domicilio y a alrededor de 50 Km/h . A esta velocidad, el choque es similar a una caída de un 4º piso, y un niño de 25 Kg. es proyectado hacia adelante con una fuerza equivalente a 1 tonelada. |
En caso de accidente es mejor que esté suelto y salga despedido. | Las estadísticas demuestran que ser despedido fuera del vehículo aumenta 6 veces las posibilidades de morir en un accidente. Además, el 20% de los niños accidentados, no atados, salen expulsados fuera del vehículo por el parabrisas. |
Los chicos no soportan viajar atados. | Es una cuestión de hábito. Está demostrado que cuando los niñós se acostumbran desde pequeños a viajar sujetos, lo toleran muy bien. |
Los sistemas de cinturones no son cómodos. | Todos los asientos y correajes están diseñados para brindar el máximo confort, y los más pequeños, cuentan con especiales condiciones de comodidad: tienen apoyos laterales, viajan sobreelevados y pueden ver más a su alrededor, sus piernitas descansan sobre formas adaptadas, etc. |
Las sillitas son caras y se usan poco tiempo. | Si bien es cierto que hay que hacer un gasto extra, cualquier lesión grave acarrea más gastos y la vida de los hijos es invalorable. |
Para el bebé de 0 a 9 meses (menos de 9 Kg.) | |
Para los niños de 9 meses a 3-4 años (9 a 15 Kg.) | |
Para los niños de 3-4 a 6-7 años (más de 15 Kg.) | |
Para los bebés por nacer. La mamá embarazada debe proteger a su bebé usando siembre el cinturón de seguridad en el vehículo, cuidando que la parte horizontal de la correa pase por debajo de su vientre y la diagonal pase por encima. |